jueves, diciembre 08, 2011

LO QUE VA DEL DERRUMBE Capítulo 12


Ojalá los seres humanos tuviéramos la resiliencia del Diente de León
Una de las cosas que más me llaman la atención de este proceso de movimiento de masa, es la manera como en este momento el paisaje cambia día tras día, hora tras hora, de manera muy radical (antes cambiaba pero año a año y luego mes a mes).

Estas dos primeras fotos, tomadas el 20 de Noviembre pasado, muestran la avenida Circunvalar en dirección sur-norte, a la salida del 'túnel', antes de llegar a la Diagonal 94. En esa momento la subida por la 94 ya llevaba varios días interrumpida.

Las dos fotos de abajo muestran el mismo tramo a partir de la prolongación del derrumbe tras las lluvias del 5 de Diciembre (ver capítulo anterior de esta serie). Resultó providencial (¿o sería un milagro de Nuestra Señora del Derrumbe?) que cuando se vino abajo esta porción de la ladera (alrededor de las 10:30 pm) no hubiera habido ni carros, ni motos por esta parte de la Circunvalar, que normalmente está atiborrado de vehículos.
Miren, por ejemplo, de un día para otro como cambia el tapón
Las fotos siguientes corresponden al tramo de la Circunvalar que, de norte a sur, arranca a la altura de la carrera 7a con calle 92. A raíz de las obras de emergencia que se llevan a cabo desde el 6 de Diciembre, en este momento ese tramo se encuentra cerrado. Cuando cesen esas obras se podrá reabrir, pero es necesario mantener en todo momento la alerta porque puede ocurrir un nuevo deslizamiento cuyos efectos lleguen hasta este segmento de la avenida Circunvalar.




Hasta el 5 de Diciembre la porción desnuda de ladera estaba cubierta por una "pantalla" de concreto. El agua se fue infiltrando poco a poco por detrás, hasta que la reventó. Cuando el agua reclama sus derechos, no hay pantalla que la ataje.
De alguna manera este derrumbe creciente, que afortunadamente no ha producido pérdidas de vidas, resume un problema grave propio de la manera como se suele intervenir frente a las dinámicas de la naturaleza aquí y en el resto del país: se aplican 'soluciones' puntuales, grandes y costosas obras de infraestructura, pero sin abordar la ladera de manera integral, como al ser vivo que es. Los deslizamientos revelan la existencia de filtraciones de agua bajo la corteza exterior de la ladera, que crean una 'capa deslizante' sobre la cual se mueve toda la montaña. Las obras de infraestructura son absolutamente necesarias, pero deben servir para 'concertar con el agua' una solución que facilite su flujo sin que genere estas amenazas, que ya tienen connotaciones de desastre. Seguramente el agua se suma a otros factores de inestabilidad de la ladera, el escarpe de una montaña que debe sostener la inmensa carga de la urbanización.




La mirla de páramo, huésped habitual de mis blogs, me acompañó esta mañana a tomar estas fotos.

Este beduino bogotano inspecciona la situación (¿O vendrá de buscar a la mujer con burka?

Claro: como todos están de anaranjado, no se meten con esta ingeniera vestida de azul

Colega fotógrafo

Este aviso se encuentra en el sitio desde años atrás, desde antes de que hubiera "hombres trabajando", como una premonición.


Cuadrilla pluriétnica y multicultural
PELIGRO

En varias partes de la ladera se notan signos que alertan sobre la probabilidad de nuevos deslizamientos. Con muchos menos comenzó a gestarse el gran derrumbe en 2006 (ver los primeros capítulos de esta serie).

Ojo con este hueco (fotos de abajo), que no es la primera vez que se abre y que anuncia a gritos que bajo esta vía- el único acceso que queda para subir a las carreras 4a y 3a en esa parte de la ciudad- existe un proceso que está horadando el suelo y que podría causar el hundimiento de la calzada. El efecto menos grave sería el aislamiento total del sector.

El hueco se abrió por primera vez en Diciembre 2008, hace tres años.
Allí fotografié la MUJER CON BURKA

LA PARTIDA DE LA "U"

Desde hace meses, la incomprensible prohibición de hacer la "U" para virar de sur a norte en la carrera 7a con calle 92, obliga a quienes necesitan acceder al sector situado al oriente de la Circunvalar, a meterse a la zona de riesgo por deslizamiento (y hasta hace poco, a dos deslizamientos distintos, el otro en la calle 88). Esta mañana tuve oportunidad de comentarle personalmente al Secretario de Movilidad del Distrito, esa preocupación, y pude proponerle algunas alternativas para garantizarle seguridad a los peatones. que necesitan (que necesitamos) atravesar la carrera 7a en ese lugar. La existencia de 8 -sí: ocho- semáforos, no todos coordinados entre sí, nos obliga a los peatones a pasar por lo menos en 4 etapas del costado oriental al costado occidental (y viceversa) de la carrera 7a. Ese problema grave para los peatones no se soluciona prohibiendo la "U".

Nota: el anterior Secretario de Movilidad, antes de dejar el cargo, atendió esta solicitud y ordenó retirar la prohibición de hacer la "U" en ese lugar.