PARA ENTENDER EL SISMO DE HOY

El epicentro del sismo que se registró a las 9:16 de esta mañana fue Ospina (Nariño, Colombia). Tuvo una profundidad de 186 kilómetros y una Magnitud 6.9 

Muy cerca de allí está Túquerres, en el bellísimo Valle de Guachucal. Cuando estuve en esa población hace varios años me dijeron que el Santo que se encuentra en la fachada de la Iglesia principal es San Emigdio, patrono de los terremotos. Los temblores en la zona son constantes por las características sísmicas y por la vecindad con los volcanes Cumbal, Azufral y Galeras.

Estatua de San Emigdio en la iglesia principal de Túquerres, colocada allí en 1958

Foto de 2003, cortesía de Jhon H Caicedo de la Corporación OSSO

 La profundidad del sismo  indica que no fue producto del movimiento de una falla local sino de la subducción de la placa de Nazca bajo la placa suramericana. La placa de Nazca se mete literalmente bajo la placa suramericana, como un carro pequeño cuando se estrella de frente contra una tractomula.

Cuando el hipocentro, foco o punto de ruptura de un sismo es superficial (menor a 30 kms) sus efectos son similares a los que ocurren cuando regamos una planta con el chorro de una manguera. En cambio cuando es profundo son equivalentes a lo que sucede cuando regamos el jardín con una regadera. Cuando uno percibe el movimiento que genera el sismo como una hamaca, probablemente el epicentro está lejos y el foco es muy profundo. Un sismo superficial genera un movimiento de canguros saltando. Si uno está cerca o encima del epicentro, el sismo se siente como si dos canguros estuvieran haciendo el amor en una hamaca... y uno en la hamaca con ellos. (Del "Manual para enamorar a las cañadas")

La manera como se percibe un sismo y los efectos que produce no solamente dependen de la magnitud o cantidad de energía liberada por el fenómeno, sino del tipo de suelo afectado por las ondas telúricas. Esto explica por qué un sismo relativamente lejano se sintió fuerte en la zona plana de Bogotá. Gran parte de la ciudad está construida sobre lo que fue un lago y sobre humedales "rellenados". Posiblemente eso también contribuyó a los daños en algunos sectores de Cali.

 Estos dibujos de Simón Wilches Castro forman parte de la cartilla y del CD interactivo "¡Ni de Riesgos!" que elaboramos con posterioridad al terremoto del Eje Cafetero (2001)